

Los espárragos blancos frescos son una excelente fuente de fibra, minerales y vitaminas, y ofrecen muchos beneficios para la salud. Contienen una gran cantidad de antioxidantes que ayudan a combatir el envejecimiento prematuro y los radicales libres dañinos. Además, son ricos en vitaminas A, C y E, que ayudan a mejorar la inmunidad, aumentar la energía y mantener la piel y los ojos saludables.
Por su contenido en fibra se recomienda para aliviar el estreñimiento y para mejorar la digestión.
Contribuye a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, la presión arterial alta y la diabetes.
Su contenido de aminoácido asparagina, beneficia la salud del cerebro y el sistema nervioso.